Iglesia y Cripta de San Martín

La iglesia de San Martín

D-R-San-Martin

La iglesia comenzó a construirse en el año 1386 bajo la dirección del maestro Juan Pedro Terol, primero, y luego de Miquel García, por recomendación del maestro Pere Balaguer. Se levantó siguiendo las características del gótico valenciano de la época, sobrio, sin contrafuertes y con muros de gran grosor. De una sola nave, tenía dos coros separados: uno para los  padres y otro para hermanos y conversos. El retablo mayor estaba dedicado a San Martín obispo y fue pintado al temple sobre madera por Joan Reixach. Actualmente, puede contemplarse en el Museo Catedralicio de Segorbe.

 

En la concepción de esta iglesia confluyen tradiciones distintas, aunque convergentes. La primera la encontramos en las capillas reales y principescas, un oratorio privado al que se accede a través de un discreta tribuna, que evita romper con la clausura al tiempo que otorga al miembro de la casa real el disfrute de un lugar privilegiado desde el que seguir el desarrollo de los oficios religiosos. Por otro lado, no podemos olvidar la tradición de las capillas de reliquias en conexión con la declarada pasión del infante Martín por atesorarlas.

 

La iglesia se acabó de construir en 1401 cuando Martín ya había sido proclamado rey de la Corona de Aragón, tras el fallecimiento en accidente de caza de su hermano Juan, hecho que determinó un futuro muy diferente del inicialmente proyectado para el monasterio de Valldecrist.

 

CRIPTA DE SAN MARTÍN

Al subterráneo de la Iglesia de San Martín se accede por una escalera adosada a su lado oriental y se ilumina por tragaluces abiertos al mediodía. Las bóvedas son de crucería simple, con un ligero rampante, sección rebajada y nervios que descansan en ménsulas embutidas en el grosor de los muros. La existencia de una hornacina en la pared occidental refuerza la tesis de la función de cripta a la que inicialmente se destinó este espacio.

 

No es infrecuente que arquitectónicamente se unifiquen las dimensiones de relicario arquitectónico y de oratorio palatino, y muchas veces estas capillas de reliquias adquieren un sentido funerario. Cuando empieza a edificarse San Martín, el infante no tenía motivos para saberse futuro heredero al trono de la Corona de Aragón. No podía considerarse, por tanto, una capilla real, pero sí un lugar de culto privilegiado y un posible lugar para el enterramiento para los miembros de su familia.

 

De usos posteriores, como el de bodega, se conservan restos como una fuente que comunicaba directamente con la cisterna del claustro de San Jerónimo, por medio de un inteligente sistema de conducciones, permaneciendo así siempre llena. El estrecho y profundo túnel construido como canal de desagüe de la estancia es uno de los elementos que más leyendas ha concitado alrededor de Valldecrist: desde la de pasadizo con perfume literario por el que se producen entradas y salidas misteriosas al de escondite de guerrilleros antifranquistas, los maquis de la Agrupación Guerrillera de Levante y Aragón. También observamos el hueco donde se conservaba la nieve para mantener fresco el pescado, con una regata de desagüe.

- La iglesia se acabó de construir en 1401 cuando Martín ya había sido proclamado rey de la Corona de Aragón, tras el fallecimiento en accidente de caza de su hermano Juan, hecho que determinó un futuro muy diferente del inicialmente proyectado para el monasterio de Valldecrist. -